martes, 23 de julio de 2013

Asi es mi amor por Sonia López

La historia de la palabra infinito viene del Latin infinitus, una combinación de "in" que significa no o sin, y la palabra finis que significa fin o limite. Una de las primeras personas en considerar la noción de infinito fue el filósofo griego Anaximander, quién usó el terminó "sin fronteras" (apeiron). Infinito ha sido históricamente dividido en dos tipos: aquella concebida como actual (ya sea el espacio, tiempo, o Dios) y aquella que solo existe en nuestras mentes, como los conceptos de lógica y matemáticas. Este segundo tipo de infinito se le conoce más como infinito cuantitativo. El símbolo que hoy día conocemos como infinito se llama realmente lemniscate. INFINITAS BENDICIONES BUENAS NOCHES!